La tierra que nos alimenta
El aire que nos da el aliento
El agua que nos sacia la sed
El fuego que nos calienta
Los elementos están presentes en nuestro cuerpo y aprender a reconocerlos y hacer contacto con ellos nos llevará a una vida más sana y mas equilibrada, por lo tanto a ser más Felices.
El arte de prolongar la vida aumentando la energía vital es un proceso alquímico que incluye el conocimiento y conservación de los cuatro elementos que se manifiestan en nuestro Ser reflejados como en un espejo.
La tierra, es la base, mis raíces, da estabilidad y forma. Lo físico y lo tangible forman parte de mi tierra.
Movernos con caminatas, actividades que generen emoción, correr o saltar permiten a nuestra tierra manifestarse de forma tranquila, alegre, pacífica y amorosa. Con una tierra equilibrada nuestro actuar es tranquilo y sosegado. Exceso de tierra por falta de actividad nos hace sudar en exceso, tener problemas digestivos y resfriados. En la parte emocional tendemos al letargo, la pesadez y al no actuar.
La tierra es negra o marrón , pero en ella se ocultan todos los colores y al llegar la primavera todos afloran ver una gama extensa de rosas, morados, azules, blanco, ninguno se esconde, todos se muestran en su gran esplendor.
Así nosotros, al dejar emergen de lo oscuro de nuestro Ser lo oculto, lo escondido, sembramos una semilla que con el cuidado adecuado florecerá dejando emerger todos nuestros colores.
El Agua, se conecta con el fluir, el movimiento, lo que sentimos.
Nuestra agua limpia se manifiesta sintiéndonos sensibles e inspiradas, queriendo compartir y convivir con otros.
El agua estancada nos hace sentirnos débiles, explosivos e incapaces de controlar los sentimientos.
Un momento de soledad nos reconecta con nosotros mismos. Escuchar música o realizar actividades artísticas para permitir el fluir del agua, les permite limpiarse y retomar su cauce natural. Si es posible, darse un baño con aceites aromáticos. Respiración larga, lenta y profunda.
El Aire, se percibe en cada inhalación y exhalación , en el latir del corazón, en nuestra palabra.
El aire es movimiento, pero el exceso puede arrasar con todo. el aire es creatividad, libertad y movimiento.
Un aire descontrolado, reseca la piel, genera gases y articulaciones poco flexibles. Pies y manos frías, cabello áspero. caos y dispersión son las emociones predominantes cuando el aire es el elemento dominante en nuestra vida.
Bajar el ritmo de nuestras actividades equilibrará el flujo de este elemento, buscar el calor, el fuego, mantenerse en el aquí y ahora, poner los pies sobre la tierra. Ser consiente de la respiración, de nuestras palabras y del latir de nuestro corazón.
El Fuego
Genera el movimiento, tiene el poder de transmutar emociones y pensamientos, es luz y calor. Un fuego vivo nos hace sentirnos con energía, nos proporciona claridad y capacidades de líder.
El fuego desmedido genera migrañas, acidez, agruras. El juicio predomina en ti e irrumpes en ira y violencia. Por el contrario este elemento en equilibrio te permiten digerir adecuadamente, a tener una piel humectada y un metabolismo que funciona correctamente.
Ante el exceso de fuego podemos consumir bebidas frías, realizar actividades que nos refresquen como la natación, meditar, cuidar de no consumir alimentos irritantes como el café, los picantes y el alcohol.
Practicar la contemplación .
Las energías mal distribuidas en nosotros genera toxinas que se depositan en nuestros tejidos a nivel físico pero también a nivel mental y emocional. Equilibrar el aire, el fuego, la tierra y el agua nos lleva a mejorar nuestra salud facilitando la digestión, los movimientos, fortaleciendo la estructura ósea y limpiando nuestros fluidos.
Con nuestros cuatro elementos limpios y fortalecidos nuestro sistema nervioso se tonifica y nos permite vivir de manera sana y balanceada.
Nuestra última sugerencia y la má importante para limpiar renovar y equilibrar tu tierra, tu aire, tu viento y tu fuego es la práctica del Temazcal como disciplina. Con él, aprenderás a contactar con tu cuerpo físico y tus elementos, así, poco a poco aprenderás a utilizarlos como instrumentos para llevar una mejor vida. Reconocerás tu cuerpo emocional y las manifestaciones de tu Alma que te irán guiando hacia una existencia mas plena.
El Temazcal fortalece la voluntad y una fuerza de voluntad impecable nos lleva a la acción. Asi mismo, Engendra un Espíritu constructivo, pero debemos entender que esto no es un envio del cielo sino el producto obtenido por el trabajo y la disciplina del hombre.
No se ama el Espíritu sino amamos el cuerpo, no es posible lastimar el cuerpo sin que el espíritu resulte lastimado en igual proporción.
Cuida tu cuerpo físico, alimenta tu cuerpo espiritual y descansa tu mente.
Próximo Temazcal 9 de febrero
Pregunta cuando es el siguiente al tel cel: 22 21 83 42 46
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